Los científicos están demostrando que si queremos tener a los usuarios a nuestros pies se debe traficar con los sentimientos. La respuesta emocional puede ser feliz o triste, pero cuanto más intensa sea la reacción, más probabilidades tenemos de que la información sea compartida - tanto si es un texto, una foto como un vídeo-.
Un estudio de Rosanna Guadagno, psicóloga social en la universidad de Texas en Dallas, demostró que los 256 participantes preferían reenviar mucho más un vídeo divertido que uno donde un hombre cura una picadura de araña que había sufrido. Pero estos estaban dispuestos a compartir un vídeo que les provocara una sensación intensa, según Guadagno.
Otros investigadores, Jonah Berger y Katherine Milkman, de la Wharton School de la Universidad de Pennsylvania, descubrieron que los artículos del The New York TImes. que levantan el estado de ánimo tienen más probabilidades de ser compartidos que los que deprimentes. Pero, entre las informaciones tristes, si estan despertaban ira o emociones negativas fuertes tendían a ser más compartidas.
La conclusión es que los contenidos más virales son aquellos que:
1) Despiertan sentimientos felices, más que deprimentes.
2) Los que hacen sentir emociones intensas: ira, odio, entusiasmo, euforia, llorar,... Tanto si son positivas como negativas.
Por este motivo, los vídeos de gatos tienen tanto éxito. Empatizamos con estos animales porque nos caen bien, son bonitos y despiertan sentimientos de ternura. Y encima, si el minino está realizando alguna gracia, nos entra la risa y compartimos con más entusiasmo el vídeo entre nuestros contactos.
Laia Cardona
Fuente:
Primerahora.com
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